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Desarrolla tu resiliencia con estos 3 pasos súper simples
- Fernando Albert

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Desarrolla tu resiliencia desde hoy siguiendo 3 sencillos pasos
Hola todo el mundo. ¡Espero que estés teniendo una semana increíble! Me alegro de todos los comentarios sobre el Aura Índigo y fue fantástico hablar con algunas de vosotras. Como compartí en el artículo anterior, me alegré mucho cuando vi mi aura índigo en 2010. Hoy quiero hablar de algo súper importante, algo que me temo que va menguando en esta civilización humana. Te daré 3 sencillos pasos para desarrollar tu resiliencia hoy y mejorar un poquito cada día.
Quiero empezar diciendo: «Con suficiente resiliencia, puedes superarlo todo». En cierto modo, esto es cierto, pero para llegar allí, es necesario ascender. Estás leyendo esto, y sólo con esto, ya estás empezando a construir tu resiliencia, ¿cómo? Debido a que estás interesada y estás proyectando intenciones de ser más resiliente, ¿no es así? Cuando quieres algo y lo sientes desde tu Chakra del Corazón, ya marcas la diferencia. Por eso las emociones son tan poderosas e importantes.
Lo digo en serio. Al sentirlo ya lo estás enviando al Universo y activando el Principio del Mentalismo para promover una mayor resiliencia en tu vida. No puedes imaginar lo positivo que es que estés empezando a aumentar tu resiliencia porque, lamentablemente, mucha gente está haciendo lo contrario. La mayoría de las personas son cada vez menos resilientes y esto está perjudicando a la sociedad en su conjunto. Entonces, ayuda a divulgar la resiliencia compartiendo este artículo. ¡También estaré muy agradecido si lo haces!
Primero, descubramos un poco más sobre la resiliencia
A veces, la gente confunde resiliencia con estar siempre feliz, y si bien ambas van casi juntas de la mano, no son lo mismo. Quiero tener un enfoque más personal, informal e incluso espiritual de la resiliencia. Si deseas ceñirte únicamente a uno más psicológico o científico, puedes consultar este artículo de la Asociación Estadounidense de Psicología (en inglés). Aquí, tendremos un enfoque práctico y 3 pasos simples para que comiences a maximizar tu resiliencia en el trabajo, por ejemplo, así como en otras situaciones de la vida.
Para simplificarlo, la resiliencia es la capacidad de levantarse después de que te tiren al suelo. Tenemos muchas experiencias positivas y negativas a lo largo de la vida y algunas pueden resultar agotadoras. Muchas veces tienes que enfrentarte a obstáculos en el camino y, a veces, parece que hay baches tras baches.
Aquí tienes dos opciones: rendirte y no llegar nunca a tu destino, o seguir conduciendo a través de los baches. Si eliges la segunda opción, seguro que sabes cómo encontrar la fuerza para seguir adelante, lo que significa que aquí tienes algo de resiliencia. Lo mejor aquí es que después de golpearse la cabeza suficientes veces mientras conduces a través de los baches, encontrarás una mejor solución para hacer que la conducción sea más suave, es decir, desarrollar resiliencia.

Quiero decir que me preocupa el estrés y la resiliencia en esta sociedad en la que todos vivimos. Parece que las masas se están volviendo impacientes y cada vez menos resilientes. ¿Te sientes identificada? Pregúntate honestamente si necesitas todo «ahora», especialmente cuando es algo que, por ejemplo, se rompió o se convirtió en un problema que necesita ser solucionado. La resiliencia social está en peligro y, en cierto modo, quizás algunas grandes corporaciones podrían querer esto para el éxito de la productividad, pero te digo que no sirve a tu propósito más elevado.
Debes dejar de enfocarte en el vaso medio vacío, ¡no seas tan desagradecida, por favor! A partir de aquí, ya puedes comenzar a construir resiliencia, porque de un fracaso lo verás como una oportunidad para crecer como mínimo. A veces, un fracaso puede darte nuevas oportunidades, pero necesitas seguir adelante para que esto suceda.
Intenta no renunciar a nada solo por una semana. ¿Demasiado difícil? Bueno, no te preocupes, aplica esto solo a tus pasatiempos o algo que disfrutes. En cierto modo, te verás más fuerte, especialmente si superaste un desafío gracias a mantenerte al día con él. Si comienzas con algo pequeño, sigue intentándolo hasta que lo logres, es probable que llegue pronto. Una vez que lo logres unas cuantas veces, inténtalo con algo más difícil, como una tarea en el trabajo.
Resiliencia versus fortaleza mental
Si bien creo que estos dos son mejores amigos, no son lo mismo. Imagina un muro enorme que rodea un castillo. Uno de sus propósitos es recibir golpes y mantenerse fuerte. Esto simplemente define la fortaleza mental. Por otro lado, la resiliencia podría definirse como un boxeo contra un muñeco que, independientemente de cuántos golpes reciba, siempre volverá a su posición original sin romperse, manteniéndose tan fuerte como siempre.
Estos dos trabajan en completa unión porque una mayor fortaleza mental permite una mayor resiliencia. Es una especie de adaptabilidad y resiliencia que crecen juntas. Sabes cómo mantenerte más fuerte después de recibir un golpe. También aprenderás a evitar el próximo golpe, o tal vez el siguiente. Te irás adaptando a tus retos, entendiéndolos mejor y, con el tiempo, superándolos. Una vez que lo hagas, te harás más fuerte y estarás aún más preparada para el próximo reto.

Pero no puedes ser solo fuerte y depender de defensas casi inquebrantables. Incluso el muro más poderoso puede colapsar y, si es así, tú también debes estar preparada. Tienes que saber cómo recuperarte y, a veces, recibir golpes es necesario para empezar a desarrollar resiliencia. También puedes entrenar la resiliencia emocional con algo de sabiduría, sabiendo de antemano cómo estar preparada para los posibles golpes. Saber más sobre el tema también ayuda, así que ¡sigue leyendo!
3 sencillos pasos para desarrollar resiliencia
Bien, vayamos a la parte más jugosa. Vamos a hablar de 3 sencillos pasos para desarrollar resiliencia a partir de hoy. Tú también podrás desarrollar resiliencia y hacerte más fuerte, solo necesitas tener la voluntad, y si todavía estás leyendo, estoy seguro de que ya la tienes.
Paso 1: Siéntete conectada y cree en tus habilidades
¿Recuerdas cuando te hablé del vaso medio lleno? Aquí es donde se aplica, especialmente al principio. Digamos que crees que no eres tan buena andando en moto porque no llegaste al top 10 este año. Piensa en algo que nunca harías en la vida porque no te gusta, y ciertamente sabes que no tienes y ni siquiera quieres esa habilidad. ¿No te sientes ya mejor motera? Ciertamente tienes la habilidad, sólo necesitas entrenar más. Utiliza esto como enfoque fundamental cada vez que falles y seguirás adelante.
Si lo piensas bien, seguirás esforzándote y seguirás haciendo lo que te encanta hacer: andar en moto. Tal vez llegues a un punto en el que estés satisfecho con tu desempeño y ya no te importe la competencia. En última instancia, esto te hará más fuerte porque dejaste atrás el ego y ahora sólo sigues mejorando porque lo amas y sigues practicando, sin presión. Puedes aplicar esto a todo en la vida, permitiendo avanzar en cualquier cosa que persigas, a pesar de los intentos.
Paso 2: Sé optimista y acepta el cambio
La vida se trata de progreso y cambio, te guste o no. Si consigues surfear la ola estarás en una posición fantástica, pero seguro que no dejarás de concentrarte para no caerte de la ola. Aquí tienes que estar preparada para todo y si te las arreglas bien seguirás surfeando la ola. De lo contrario, tendrás que seguir subiendo a esa tabla e intentarlo de nuevo. Lo mismo ocurre, por ejemplo, en el trabajo: puedes estar en la cima y probablemente lo seguirás estando si aceptas el cambio.

Es probable que tengas poco o ningún control sobre muchas cosas de tu vida profesional y personal. Hay libre albedrío y mucha gente. Y con «mucha» me refiero a esa gente que parece actuar en la vida sin razonamiento. Lamentablemente, estas personas pueden dañar a la sociedad y es necesario adaptarse y aprender a estar por encima de lo que nos deprime. Sin embargo, no debes vivir con miedo, por lo que debes asegurarte de seguir proyectando positividad en lugar de concentrarte en posibles resultados negativos. Toma esto como otro enfoque fundamental cada vez que la preocupación comience a acumularse.
Paso 3: establece objetivos más fáciles con muchos puntos de control y celebra las pequeñas victorias
A veces, lo que se necesita para desarrollar la resiliencia es experimentar cierta positividad. Si tu único objetivo es llegar al final, estás en problemas. Este debería ser tu objetivo, sí, pero no el único. De lo contrario, desafío tras desafío verás este final tan lejos que te rendirás. En su lugar, establece metas pequeñas y razonables para que, al sumarlas todas, estés más cerca de ese final.
Aquí podrás ser el doble de feliz. Puedes estar feliz porque alcanzaste un determinado punto de control, pero también puedes estar feliz porque contribuiste a la meta general y ahora estás más cerca de ella. De esta manera, nunca te concentrarás en lo que aún está por lograr, sino en lo que estás logrando ahora mismo. Por supuesto, debes estar contenta contigo misma por lograr cosas. No hay mejor manera de sumar pequeñas victorias y terminar muchos puntos de control. Considera esto como otro enfoque fundamental ante los retrasos y las expectativas incumplidas.
La práctica del día a día y las ganas son tus claves
Ser emocionalmente resiliente significa tener también muchos recursos para una rápida recuperación, así como perseverancia para seguir creciendo con una piel más fuerte cuando duele. Sin embargo, esto no surge de la nada y, como ocurre con todo, necesita práctica. Ahora tienes algunas ideas sólidas para seguir adelante y, aunque hayas sucumbido al fracaso, no te enfades. Lo has notado y ya estás intentando levantarte, no hay mejor resiliencia que esta, por eso debes estar orgullosa de ti misma.
¿Qué contribuye positivamente a la resiliencia?
Como algunas reflexiones finales sobre la importancia de la resiliencia, quiero compartir algunos puntos breves que debes de tener en cuenta para contribuir positivamente a tu resiliencia. Como dije antes, no se trata de hacer que te resulte más difícil desarrollar músculo.

Para evitar lecciones y obstáculos aún mayores y problemas a largo plazo, es necesario comenzar con pesos más pequeños. Sin embargo, lamentablemente a veces no puedes elegir los pesos, sino que la vida te los tira. Tener en cuenta lo siguiente te ayudará:
- Habilidades de afrontamiento: Hay maneras y maneras de al menos adaptarse un poco. La cama más incómoda del mundo sigue siendo mejor que el suelo duro. Si bien quieres apuntar más alto, si estás en el suelo, debes tomar lo que tienes frente a tus ojos, y todo ayuda a afrontar mejor el problema mayor. ¡Imagínate diez pequeños puntos de apoyo vs ninguno!
- Apoyo social: contar con algún apoyo es importante, ya sea alguien a tu alrededor, amigas, vecinos o incluso grupos de apoyo social disponibles en tu barrio. Muchas veces, compartir la carga marca una gran diferencia. Las historias de otras personas te ayudarán enormemente a empoderarte (y las tuyas a ellas), contribuyendo a una mayor adaptabilidad y resiliencia.
- Importancia de la autoestima: debes empezar a centrarte en lo que más te gusta de ti misma y en lo que no te gusta. Todo el mundo puede tener un mal día y esto no significa que seas terrible en lo que haces. Quizás ni siquiera sea culpa tuya, pero debes levantarte y comprobarlo, y sólo encontrarás las ganas si estás segura de haber hecho un buen trabajo. Potenciar tus rasgos positivos te permitirá encontrar formas de potenciar también a los más débiles.
- Habilidades de comunicación efectiva: A veces, si necesitas ayuda, sólo tienes que pedirla. Quizás estás leyendo esto y deseas sentirte mejor contigo misma y con tus desafíos. Como dije anteriormente, compartir tu carga con aquellos que están dispuestos a ayudar, facilitará las cosas. Necesitas hablar sobre tus emociones, ideas e incluso miedos. Puedes fortalecerte y lo harás hablando, compartiendo experiencias y leyendo a otras personas. Entonces, ¡te invito a dejar un comentario a continuación y compartir tu historia!
A partir de aquí, debes empezar a ser más consciente de tus emociones y de cómo te desenvuelves en la vida. No es necesario que seas una persona inquebrantable y resiliente, pero si te vuelves un poco más fuerte cada día, verás una diferencia en el futuro y, en última instancia, esto te hará sentir mejor.
Preguntas más frecuentes
P: ¿Qué es la resiliencia?
R: La resiliencia se refiere a la capacidad de adaptarse y superar momentos negativos y experiencias de vida desafiantes.
P: ¿Por qué es importante la resiliencia?
R: La resiliencia es crucial para superar los desafíos, mantener un bienestar mental óptimo y mejorar el bienestar.
P: ¿Cómo puedo desarrollar la resiliencia?
R: Desarrollar la resiliencia implica desarrollar la autoconciencia con una autorregulación adecuada. Desarrollar habilidades de afrontamiento con gran optimismo y sólidas conexiones sociales.
P: ¿Qué es la resiliencia emocional?
R: La resiliencia emocional es la capacidad de lidiar siempre con cualquier estrés emocional y adversidad con un comportamiento positivo, y ser capaz de levantarse nuevamente incluso si sufres un problema grave.
P: ¿Qué implica la teoría de la resiliencia?
R: La teoría de la resiliencia explora cómo las personas se adaptan y evolucionan cuando se exponen a la adversidad, las pérdidas y los riesgos. En cierto modo, esto sugiere que la resiliencia se puede desarrollar con el tiempo.
P: ¿Cómo contribuye el apoyo social a la resiliencia?
R: Si tienes conexiones importantes y la capacidad de establecer contactos con conexiones de apoyo, te fortalecerás gracias a la asistencia emocional y práctica, que ayuda a las personas a afrontar y recuperarse de todos los desafíos de la vida.
P: ¿Se puede aprender la resiliencia?
R: ¡No lo dudes! De hecho, la resiliencia se puede desarrollar mediante la práctica intencional. Poco a poco irá adoptando estrategias y mentalidades positivas para afrontar la situación. Lo único que importa es seguir intentándolo, y si te caes, volver a levantarte. ¡Claro que puedes!
P: ¿Qué papel juega la autoestima en la resiliencia?
R: Si tienes una autoestima alta, aumentarás tu confianza y te sentirás más capaz de afrontar cualquier situación difícil que debas afrontar.
P: ¿Cómo impactan las habilidades de comunicación en la resiliencia?
R: La comunicación es esencial para ayudar a las personas a buscar apoyo, así como para tomar medidas cuando sea necesario. Te puedo ayudar en una sesión de Habla con Fer.
P: ¿Cuál es la diferencia entre resiliencia psicológica y emocional?
R: La resiliencia psicológica habla de fortaleza mental para poder afrontar la incertidumbre y los desafíos. La resiliencia emocional se centra en afrontar y curar el estrés emocional.
Bueno, creo que esto es todo por esta semana. Debo decir que la resiliencia es algo por lo que juro. Estoy extremadamente agradecido por mi resiliencia porque si no fuera por ella, probablemente no estarías leyendo esto, o quizás nada en absoluto. Nunca se sabe, pero lo que sé es que seguí adelante gracias a ello, así como a mi esfuerzo diario, y por supuesto, a vuestro apoyo, que este último es totalmente imprescindible, y os estoy súper agradecido a todas vosotras. ¿Cuánto te beneficias de tu resiliencia? ¡No dudes en dejar un comentario y charlaremos sobre ello!
La próxima semana hablaremos de Usui Reiki y de Mikao Usui en particular. Ya sabes lo que siento acerca de las etiquetas, sin embargo, algunas cosas deben respetarse. En este caso, aunque comencé a enviar sanación de forma natural, comencé a recibir algo de disciplina en las muchas artes curativas de las enseñanzas de Mikao Usui, así que compartiré un poco sobre el Reiki de Usui. Hablaremos más en una semana. ¡Nos vemos el próximo miércoles!
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